Subconsciente o Marionetas en la Cuerda
Dicen los psicologos, y hay un gran consenso en ésto, que una enorme parte de nuestra mente, a la que llaman subconsciente, está repleta de deseos insatisfechos, objetivos inalcanzados, ideas no realizadas, bajos instintos, y en general toda una serie de objetos procedentes de nuestro pasado que están ahí forjando nuestra personalidad y dando forma a nuestra visión del mundo.
Dicen los psicologos que la mayor parte de las acciones y decisiones que hacemos y tomamos durante el día están dirigidas, sin que seamos conscientes de ello, por nuestro subconsciente.
Dicen los psicologos que, a pesar de todo, podemos influir en nuestro subconsciente usando un método que llaman autosugestión.
Dicen los psicologos que el subconsciente trabaja como un niño pequeño, no valen razonamientos con él; si queremos contactarle debemos usar un lenguaje de imágenes, sensaciones, repeticiones, etc.
Supongamos que alguien me pregunta qué hice tal o cuál día. En un principio intento recordar pero no consigo obtener los detalles. Si hombre, no te acuerdas que estuvimos comiendo en… Ah sí, en aquel restaurante de la playa…
Así es como veo yo el subconsciente. Un gran almacén de información que está ahí pero al que no podemos acceder de manera voluntaria. Sin embargo, el estímulo adecuado puede hacer que información a la que no tenemos acceso aflore a nuestra mente y nos sea accesible. Cierto que esa información no tiene por qué ser sólo recuerdos, puede contener sentimientos, sensaciones y todo tipo de objetos mentales.
Sin embargo, me parece ridículo admitir que en nuestro cerebro habita un ente con voluntad propia que dirige la mayor parte de nuestras acciones o decisiones diarias de manera caprichosa. En mi cerebro hay un ente con voluntad propia que me dirige… ¿Parece un chiste, no? No entiendo como semejante idea ha tenido tanto calado en el pensamiento de la sociedad reciente y actual.
NOTA. Aquí no hago distincicón entre Subconsciente e Inconsciente. Para los que se sientan escandalizados.